una vez, hace muchos años escribí aquí que yo tengo el poder de parar relojes. me regalan o me compro un reloj. pasan apenas unos días o semanas y pum, se paran. pensé que era un poder venido a menos porque mi reloj negro había permanecido en movimiento casi dos años.
entonces.
el domingo me compré un reloj rojo. un timex sencillito y muy bonito.
se paró.
así nomás. se paró. se paró como quien va caminando y de pronto se da cuenta de que algo olvidó pero no sabe qué.
mi don
o mi maldición ha vuelto. yo detengo el tiempo y no hay nada que usted pueda hacer al respecto.