dejé de ver Grey’s Anatomy en 2010 cuando mi novia y yo terminamos, teníamos muchos años juntas y teníamos, también, muchos años viendo esta serie juntas. la quería mucho (a la novia, no a la serie, la serie nomás me gustaba) y yo sé que ella también me quería (de nuevo, la novia, la serie ni siquiera sabe que existo), me quería a su manera (y su manera y mi manera en algún punto dejaron de coincidir) y fue la brecha generacional o simplemente debemos asumir que hay relaciones que no son para toda la vida.
también hay series que no son para toda la vida. o eso creía yo.
en algún punto de 2019 entre las entradas y salidas de mi ex al hospital o entre las idas y venidas de casa al hospital que yo hacía diariamente para verle, decidí que estaba lista para volver a ver Grey’s Anatomy. distraía mi mente, me sacaba del hospital real y me llevaba al hospital ficticio con personajes y conflictos tan distintos a los míos. mucho más interesantes, creía yo.
¿en qué momento la vida de Una toma el ritmo y el sinsentido de una serie de televisión? respuesta: cuando menos lo imaginas.
en la “relectura” de un clásico televisivo se experimenta lo que en cualquier relectura, una ya no se siente identificada con lx mismx personaje o bien, una sigue sin sentirse identificada con ningunx. mi caso, ahora, es curioso. me identifico con varixs.
yo soy todxs.
ah, la ficción restaurativa, la encuentro en todos lados. y si creen que este post o esta serie son absurdos, esperen a que les diga más.
mi ex y yo eventualmente nos separamos (créanme que la decisión y la forma de hacerlo no fue ni mía y por tanto no fue elegante). cuando ocurrió, Derek murió. durante las siguientes semanas, mientras Meredith le encontraba el sentido a ser viuda, yo le encontraba sentido a una vida en singular en un departamento más pequeño y con ataques de llanto a cada rato.
nunca he llorado tanto como entonces. y no solo por el fin de una relación, sino por la certeza de que el fin había ocurrido varios años antes.
hoy que Meredith fue golpeada brutalmente por un paciente y fue herida en varias partes de su cuerpo. hoy que Meredith tuvo que pasar por a) un largo proceso de recuperación y b) un ejercicio de perdonar y soltar, yo solo pensaba en que la muerte repentina de mi ex (sí, murió y por su enfermedad yo tenía años preparándome para eso y entiendo que una nunca se puede preparar para eso, menos cuando durante o tras ello surgen muchos más secretos de los que jamás se han imaginado) se sentía exactamente igual: como ser golpeada brutalmente en el alma, herida en varias partes de mi corazón y mi cerebro.
soy mi propia serie de televisión.
así que aunque antes de darle play al episodio era ya consciente que yo estaba en un a)proceso de recuperación, debo recordarme a mí misma que este va a ser largo, pero no tiene por qué ser sinuoso ni solitario. también que, b) que aunque el ejercicio de perdonar y soltar lo hice frente a su cama de hospital una y varias veces, debo hacerlo muchas veces más con otra persona especial: yo.
porque a veces una es su propia antagonista.
en el final del capítulo Meredith hace hincapié en levantar la voz y llenar el silencio. sea este mi nuevo intento de levantar la voz y llenar el silencio, la pantalla, algo.
todo.
quiero ser más que un paralelismo en una serie de televisión.