Pues todo indica que de Texas aparte de traerme una barriguita que yo NO tenía (al menos no en estas dimensiones) me he traído dos cosas más: piernas nuevas y trasero más redondo. Sí señores, créanlo o no, yo la otrora dueña de unas piernas popotitos y un trasero totalmente equis he logrado construir un poquito de carne. Y es que camino por las mañanas en las cumbres del Rio Grande Historic District, camino largas distancias del carro a la escuela y viceversa, aparte de las largas distancias dentro de toda la universidad. Agregue usted la clase de yoga with the omg teacher.
Estoy medianamente orgullosa de mí (culpo a la barriga de no estar completamente orgullosa), me siento como estrenando cuerpo, uno que requiere caminatas diarias, más agua (y desgraciadamente más comida después del ejercicio). Un cuerpo más resistente (excepto los piecitos que se ampollan de cuando en cuando), un cuerpo más resiliente.
Casi casi que busco pretextos para usar falda (y claro, para depilarme). Anyway, tengo nuevas piernas y sí, puedo ser muy superficial en este blog a veces.
p.s y aquí es donde yo debería adjuntar una foto de las chicas pero neeeel… im not that easy!
Pon fotos, ándale, mínimo para ver algo de ti estos días que andas Hermosillsamente enfamiliada y enmafaldada.