Siempre lo he dicho, venir al DF es venir a cargarse de energía. Como rico, platico mucho, me divierto a montones.
En esta ocasión, algo más ocurrió. Algo importante. No fue una charla, fue más que una charla. Podemos llamarlo proyecto.
Pero yo, secretamente, lo llamo de otro modo.
O.M.G.