UNA VISITA AL GOLFO de la incertidumbre

fr158heme en el trayecto hacia el golfo. básicamente será la primera vez que nos veamos, el golfo y yo (aquí es cuando yo debo aclararles que hablo del golfo de méxico y no de cualquier otro golfo, que esos se los cruza Una en todos lados). ¿que si qué hago en el golfo? pues digamos que vine a coquetearle, digamos que el golfo me dijo: “ven, verás,” digamos que el golfo y yo estaremos frente a frente yo me presentaré, él se presentará, conversaremos y luego veremos qué.

¿qué puedo adelantarles? pues que siento incertidumbre. sí, la incertidumbre se acomoda en mi estómago y en mi frente. la incertidumbre y yo somos viejas conocidas. pero esta mañana, sentada en una sala de espera, con un librito de Pema Chödrön  en la mano, tomé una decisión. después de años de evitarla, a ella a la incertidumbre, he decidido que es momento de habitarla, de serle. digamos que me le siento al lado y la dejo que haga lo que tenga que hacer, a fin de cuentas yo soy sólo un minúsculo humano sin poderes mágicos para leer el futuro.

digamos pues que la mía es una visita al golfo de la incertidumbre.

(escribo esto, por cierto, en el aeropuerto de Houson donde, lo admito, alimento la incertidumbre con unos deliciosos camarones asados).

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Un Alma Cercana