Me hice análisis. Me saqué sangre, hice pi en un vasito, entregué mis huesos, entregué lo más de mí. Todo poco a poco fue dando resultados positivos, excepto una cosa. Una-sola-pinche-cosa. Y la sola-pinche-cosa resulta que requiere a) más análisis, b) una biopsia para determinar si c) sigue una cirugía.
La sola-pinche-cosa me asustó, me hizo llorar, me hizo arrastrar la cobija y hacerme los mil por qué aderezados con los quinientos por qué ahora.
No hay más respuesta: porque sí.
Hice lo propio, ahora falta hacer el resto de lo propio y continuar este proceso de Una ser responsable de la salud de Una y cobijarse en quientantosequiere para superar la sola-pinche-cosa.