Estoy entre cinco autores. Vivo mi primer encuentro con Nathalie Sarraute con su Here y con Chuck Palahniuk con su Rant. Revivo, por otro lado, la narrativa sórdida y sutil de Sofi Oksanen con su Las vacas de Stalin. Establezco, además, una nueva y flamante relación con Emily Dickinson. La quinta autora es Tina Fey, pero a ella no la leo, a ella la dejo hacerme reír -cuando más falta me hace- a través de uno y otro episodio de 30 Rock.
¿Qué hago? No lo sé. Exploro puntuación, rudeza, estremecimiento, humor.
O algo así.
Aquí.