hay personas

Hay personas a los que uno ya no quisiera volver a ver nunca más, no cruzarlas siquiera por la calle ni en una fiesta, ni mucho menos pensar que podrían recurrir nuevamente a nosotros en caso de encontrarse en apuros; la mera mención de su nombre nos trae el recuerdo de cosas que hemos querido olvidar o negar, quizá saben demasiado de nosotros –o nosotros de ellos–, y nos resulta complejo conciliar el presente con lo que fuimos, o hubiéramos deseado ser, sin sentirnos un poco avergonzados de nosotros mismos. No queremos imaginar que un día podrían volver a irrumpir en nuestras vidas con toda la fuerza que tiene la fatalidad, como si de algún modo se empeñaran en recordarnos quiénes somos realmente.

Sebastian Basualdo

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *