DONOVAN

Pues el integrante principal de la casa de colores, donde viví el año pasado durante el verano, viene a Hillo. My very philadelphian Donovan llega el 24 y se queda casi diez días. Me ayudará a afinar los últimos detalles del super patio (uy, les debo un post sobre el super patio), revisaremos su libro y mi libro. Prepararemos largos almuerzos aderezados con intensas charlas. Estoy segura de que con ella llegará una dosis estratosférica de serotonina y de colores.

Can’t hardly wait.

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