A CABEZA ABIERTA

uEn el juego de policías y ladrones llevado a cabo entre diez y diez treinta de la mañana el de siete cayó herido. Un jalón demasiado brusco tal vez lo desequilibró y la esquinta esa de la banqueta aquella abrió su linda cabecita.

Sangre cruz roja curación otro hospital puntadas tres.

Y así a cabeza abierta, las preocupaciones del hijo fueron las siguientes:

  • pobres, los doctores casi no comen porque trabajan mucho, ¿no les podemos llevar una pizza?
  • el señor que estaba al lado de mí tenía un tubito en su brazo y decía que él se había abierto la cabeza como yo muchas veces, ¿te imaginas?
  • parece que los doctores querían ser peluqueros… chale, tan padre que tenía el cabello ya y me rasuraron.
  • ¿qué vamos a cenar hoy?
  • ya no estás asustada, ¿verdad?

El pequeño está en reposo, pensando una y otra vez que la razón por la cual el accidente no pasó a mayores se debe a tres cosas:

  1. A que rezó el padrenuestro muchas veces.
  2. A la pulserita de Jack (nightmare before xmas) que nunca se quita.
  3. Al dije ying-yang que cuelga en su cuello.

La fe de un corazón, también abierto, es increíble señores.

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